Ella estaba enamorada de la idea del amor, sin saber muy bien qué era en el fondo éste. Todo el mundo habla de querer, de estar enamorado y de amar ¿pero qué es en el fondo todo eso?
Ella no lo sabía (ni lo sabe ahora, seguramente). Su forma de querer era insana y dudaba mucho que se acercase al propósito de lo que el amor debería ser. Querer algo (o a alguien, mejor dicho) porque no lo tienes y luego hacerte con él y aburrirte no debe de ser amor. Capricho, tontería, estupidez, niñería, egoísmo pero no amor.
Quizás solo amó una vez, de manera enfermiza, de la única manera que sabía y sabe. Y sí que debió de querer bien porque no hace más que buscar eso otra vez, busca el amor, está enamorada de él. ¿Y cuando te enamoras de algo tan inmaterial como un sentimiento qué haces? ¿Cómo lo encuentras?
Es enfermizo mirar a cada persona que pasa pensando si es el amor de tu vida pero en realidad eso no se busca, aparece sin más, de la nada, sin que te des cuenta hasta que ya está ahí, en tu corazón. Así que buscar no sirve de nada aunque le resulta igualmente doloroso lanzar sus plegarias al aire en busca de un poco de mimos y amor.
Amor otra vez. No lo encontrará hasta que se desenamore de él. Desenamorarse del amor, suena tan estúpido e irracional como en realidad lo es.
0 comentarios:
Publicar un comentario
¡No muerdo, comenta!