Café calentito a las cuatro de la mañana



Son las 3:49 de la madrugada y te prometo que hay gaviotas graznando en la calle. El café se está empezando a enfriar, ¡y ya sabes tú que es eso bien difícil!, que Sirkka Liisa me pone el café bien calentito para que no se me enfríen las manos ni la nariz. Me acurruco en el sofá del Kahvi Aamunkoitteessa (o Café de las Madrugadas) mientras que espero impaciente a que llegues. Me acuerdo de cuando nos encontramos aquí la primera vez. Era invierno y en Helsinki había caído una de esas nevadas que hacen sorprender hasta a los más mayores. Por aquel entonces yo sabía tres o cuatro palabras en finlandés y me intentaba hacer entender con Sirkka para que me pusiera un café hirviendo. Era de madrugada, como hoy y sé que te hicieron gracia las caras que poníamos tanto Sirkka como yo. Te sentaste junto a la barra, pediste lo que supuse que era un café con leche y me lanzaste una pequeña sonrisa sarcástica, como para hacerme rabiar. Le hice señas a la camarera para que me sirviera lo mismo y termino por decir un largo ¡aaaaah! con una sonrisa y un pequeño golpecito en la frente que significaba lo mismo en todos los idiomas. Le pedí que me lo escribiera en un papel después de unos cuantos gestos más y entonces te echaste a reír. Como una tonta te mandé a la mierda en castellano pero para mi terrible humillación me contestase que no era un lugar bonito y que aún estaba nevando más que fuera. Me quedé con cara de tonta, con más que eso, diría yo. Y te reíste aún con más ganas, pero la verdad, nunca me he arrepentido de nada. Volviendo al presente ya son las 3:58 y no se ven ni las puntas de tu pelo largo. Me quedo sorprendida cuando un gatito realmente precioso con cara de abrázame, hazme cosquillas en la barriga y acaríciame las orejas se subió a mis piernas y me fijé en papel que llevaba en el collar. Lo abrí y el mensaje era claro. Edessä. Y justo, allí estabas frente a mí, aunque lo curioso es que ni siquiera había oído la puerta. ¡Qué raro, con lo que chirría aquel trozo de metal!
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7 comentarios:

  1. Me encantan laurita me encantan!

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  2. Mmmmm... Helsinki. Nunca he estado allí, gracias por acercármelo un poquito. ;P Menuda cara de embobada se le debió de quedar a la chica, ¡mira que encontrarte un español en Helsinki! XD

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  3. ¡Me alegro de que guste!

    Es que siempre me han encantado los lugares del nortenorte, con ese frío que hace y la gente que es taaaaan blanca *_* Los odoro jajajaja.

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  4. y la pregunta es...como se dice una travesura en finlandés?? jaja y la respuesta es....kepponen. pues eso: kepponen kaunis o kaunis kepponen ^^

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