Pasatiempos para cuando estés sin Sophie

Smile my tonight

-Arnold, creo que soy yo el que necesita tratamiento esta vez. Con urgencia. No te imaginas lo que significa tener que tratar con ella, ni una idea te puedes hacer. Lo de hoy ha sido abrasadoramente escalofriante, como lo oyes…
Después de mi última visita a Sophie me fui a tomar un café bien cargadito, aunque eso no hiciese más que inflamar mis nervios. Todo el mundo ha tenido ciertos problemas con sus pacientes, cada uno más extraño y profundo que el anterior pero cuando el estar con el paciente es el propio problema, las cosas van realmente mal. Después de convencerme de que ella no podría arruinar mi carrera de esa forma tan desoladora decidí hacerle una última visita para despedirme. Prefería irme con la cabeza medianamente alta antes que ceder ante aquello que me ponía en bandeja (que no fue fácil llegar a convencerme de ello pero de poco me sirvió nada más entrar en su cuarto).
La encontré sentada sobre la cama mientras escribía con rapidez unas líneas en una carta y no me prestó atención hasta que terminó, dobló el sobre y lo apretó con fuerza en su mano pequeña. Acudí hacia ella con las palabras preparadas en mi mente, sabiendo a la perfección qué tenía que decir, cómo me tenía que expresar y cuál sería el instante adecuado para darle la espalda y marcharme. Maldita su mente que percibía las cosas mil veces antes que la mía. Casi palpó mi nerviosismo, no le pasó desapercibido el juego de mis pies en el suelo y el que estuviese mirando por la ventana en vez de a sus ojos, que hizo que sonriera de aquella forma pícara que me enloquecía. Sabía que todo lo que iba a decirle era una mentira y ¡tonto de mí! Me había auto-distraído como un imbécil y no la vi venir (¡vaya mentira! Si vi desde el saltito que dio para bajar de la cama, su sonrisa bonita y hasta su disimulado caminar de puntillas).
Se me hicieron tan dulces sus manos por mi espalda, su tímido y menudo cuerpo contra el mío siendo una vergonzosa caricia cuando me rozó, su fingido (pero perfecto) temblor de labio inferior seguido por mi locura inmediata, por mis brazos rodeándola y mis labios devorando los suyos como un maldito demente (por ella). Es que no puedes ni imaginarte la suavidad de su piel, la calidez de sus labios, su pelo haciéndome cosquillas allí donde me tocara, su fingida inocencia que me confundía y me hacía odiarla cuando me daba cuenta de que sólo era un juego para ella pero que terminó por hacer que la adorase cuando con otro engañoso temblor de manos me acarició la cara, me entregó el sobre y se apartó de mí, liberándome de aquel encanto de sirena. Perversa mujer, que sabía de todos los trucos habidos y por haber para hacer que un hombre la adorase.
Y después, huí literalmente. Eché a correr por los pasillos apretando una mano con fuerza sin darme verdadera cuenta de que llevaba allí su carta. En un arrebato la tiré al suelo pero por el rabillo del ojo llegué a ver unas palabras. Las suficientes para que me tirara casi de cabeza hacia el suelo para asegurarme de lo que había leído. Y así era, Pasatiempos para cuando estés sin Sophie, querido (nuevo) demente, rezaba la primera línea de aquella carta.

Y lo peor de todo, Arnold, es que sí he decidido entrar en sus juegos. ¡Jugar con un loco! Aunque, la verdad, no sé quien de los dos es el loco ahora, no sabes lo que significa estar sin ella. No puedes hacerte una jodida idea.
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6 comentarios:

  1. Hey , no he leido todavía nada más pero esto último que has escrito es brillante.
    "Aplausos"

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  2. (Pues no es nada bueno jajaja pero ¡me alegro de que te haya gustado!)

    Besos de esquimal : )

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  3. Me quede encantada con tu blog, me quedo porque me quedo, soy tu seguidora. Besos, precioso el relato, hay algo en el titulo que me encanto =) Te invito a visitar mis blogs:

    http://noestoyniparatiniparanadie.blogspot.com/
    http://nubesacuosas.blogspot.com/

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  4. Juju qué chica más mala xD Como yo (H)

    Tus textos me siguen dejando... ¿cómo decirlo? Con muchas sensaciones expresadas en un símbolo, en una palabra, pero son tantas que se me atascan en las manos y sólo puedo decirte: ¡GENIAL!

    =)

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  5. Muchas gracias :D
    Siempre es lo que intento, que las sensaciones que tienen los personajes puedan traspasar las palabras, aunque a veces resulte complicado :)

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  6. didididididididoooooooosh, ¿pero qué ej eshtooooo? ¿ze va, azí zin máh? jajajaja dejo de escribir asi que asco muejejeje
    EH
    EH
    EH
    Y que más, que se va a quedar así, yo quiero ver esa lista de pasatiempos.
    ¡un abrazo!

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